El Bazar de la Confianza encierra tras él una gran mística, tanto en realización como en vivencia. De esa mística y cómo se hace, nos habla este cuento que se remite a grandes obras de la literatura, para explicar cómo este evento de Confiar Cooperativa Financiera, se convirtió en todo un evento de ciudad.
¿Sabe como mezclar el arte y la solidaridad?
La Corporación Estanislao Zuleta nos presentó el café arte del Bazar de la Confianza, para mezclar el arte y la solidaridad. Donde se presenta la organización, las ideas y el cooperativismo de Confiar Cooperativa Financiera como base para hacer trabajo solidario y arte.
En el Bazar de la Confianza para donde quiera que usted mire siempre va a encontrar a alguien con algo pintado en cualquier parte del cuerpo. Y es que esta fiesta organizada por Confiar Cooperativa Financiaera, tiene el espacio abierto para que ustede lleve el arte en su cuerpo y lo luzca cómo quiera.
Nosotros salimos a buscar todos esos encargados de pintar de color los rostros y cuerpos de nuestros asociados para mostrar un poco más de cómo hacen su trabajo.
Almorzar sobre el césped una tarde de domingo, con la señora y los hijos. Caminar por el lago y sentir los miles de olores de la gastronomía local. Y, hay para al que le gusta la carne y para el que come sano. Antójese de Antioquia, y pregunte por lo que no vea.
Entre los participantes del Bazar pueden encontrarse muchas historias de personas que se asocian para buscar el bien común. Aquí les presentamos a un grupo de mujeres tejedoras, que están por primera vez en el Bazar y que saben que en grupo se pueden lograr más cosas.
Arly Días Lobera, de la Fundación Re-habilitando, también presente en el Bazar de la Confianza, nos cuenta como desde su organización surge el apoyo a discapacitados para la creación de unidades productivas. Igualmente, resalta cómo Confiar les ha servido de ayuda para sus proyectos en sus 40 años de Confianza Viva.
En todos los rincones del Bazar hay fiesta. Mientras los abuelos recuerdan a Gardel a ritmo de Karaoke, los niños se pintan la cara, juegan, y sobretodo se bailan este evento.
La música estalla desde cualquier lugar y atrae a todas y todos, más alegría en este Bazar.
Sonrisas por doquier es lo que se puede encontrar en cada rincón del Jardín Botánico.
Niños juegan, padres también. La alegría inunda este pulmón de la ciudad y lo convierte en el lugar perfecto para disfrutar de un domingo cargado de muy buena energía y actividades en familia.
