Skip to main content

El pasado 14 de julio, en el Jardín Botánico de Medellín, se vivió una fiesta colectiva llena de encuentros, felicidad y disfrute, demostrando que el cooperativismo, como ejercicio de la confianza, es capaz de transformar el mundo y hacer posible lo imposible. La confianza fluyó como una energía que encalambra cuando pasa de mano en mano.

En la tarde del Bazar de la Confianza, el escenario se llenó de energía, color y alegría con la presentación de 70 músicos de la Banda Sinfónica de Sabaneta y 25 bailarines del Ballet Folklórico de Antioquia. Estos 95 artistas deleitaron al público con la belleza de la música y danza colombiana al son de cumbias, pasillo, porros y fandangos.

La Banda Sinfónica de Sabaneta, dirigida por Juan David Castaño Arango, es reconocida como una de las mejores de Antioquia y ha ganado múltiples concursos y certámenes a nivel nacional e internacional. Entre sus logros destacan el Concurso Nacional de Bandas Musicales de Paipa, el Concurso Nacional del Bambuco Inédito para Bandas y el Concurso Departamental de Bandas. Además, ha tenido destacadas participaciones en eventos internacionales en Valencia, España; Buenos Aires, Argentina; y Nashville, Estados Unidos.

Por su parte, la Corporación Ballet Folklórico de Antioquia, con 32 años de trayectoria, se dedica a la conservación y difusión de la danza y música colombiana, profesionalizando a los artistas de nuestro país y llevando su talento a escenarios en más de 30 países de Asia, Europa y América. Sus espectáculos, inspirados en la riqueza cultural de Colombia, son conocidos por su elegancia y por transformar las emociones del público en una experiencia vibrante de luces, música, danza y pasión.

Entre los talentos que participaron en esta celebración se encontraba Maia Ibarbo, una pequeña de ocho años que sueña con ser bailarina y reina de carnavales, siguiendo los pasos de su madre, Sirleny, ex reina del Carnaval de Barranquilla. Maia, hija del ex futbolista Victor Ibarbo, entrena nueve horas a la semana y se presentó junto al elenco infantil del Ballet Folklórico de Antioquia, interpretando dos piezas folclóricas colombianas junto a la Banda Sinfónica de Sabaneta.

«Me encanta bailar, es mi forma de expresarme, aunque lo que más disfruto es el folclor», comentó Maia, quien además practica atletismo y fútbol. Próximamente, iniciará el cuarto grado de primaria y sigue soñando con un futuro lleno de danza y alegría. «Estoy muy feliz de haber participado en el Bazar de la Confianza, y más cuando juega Colombia, porque bailando cumbia y pasillo es una forma de mandar fuerza a los jugadores», añadió la joven bailarina.

En definitiva, el Bazar de la Confianza fue una celebración de la cultura y el arte colombiano, recordándonos que cuando producimos confianza, pasan cosas maravillosas. El evento dejó en los asistentes un sentimiento de unión y alegría gracias a la Banda Sinfónica de Sabaneta y el Ballet Folklórico de Antioquia, celebrando la cultura y la cooperación que nos unen como sociedad.