- Tía, ¿de qué color son los recuerdos?
Asombrada por la pregunta de su sobrino Juan Felipe, Isabel se quedó estática en el silencio incómodo de quien no sabe. Para salir del paso le dijo que cerrara los ojos y lo descubriera él mismo. El niño dejó el dibujo que estaba haciendo, cerró los ojos unos segundos, y al abrirlos brillaban en ellos la alegría de la sorpresa.
- ¡Son rojos tía, como la capa de Caperucita Roja!
Años más tarde, esa pequeña anécdota le daría el nombre a Roja Caperuza, un emprendimiento de juguetes tejidos liderado por Isabel Cristina Gil Valencia, en la que combina la técnica del amiguimi japonés con la magia de los personajes de la literatura infantil y clásica.
“La idea de Rojo Caperuza se viene tejiendo hace muchos años. A mí me enseñó una tía política cuando era niña, pero a esa edad uno no tiene paciencia para tejer. Hace 7 años que me vine para Santa Elena el tejido me buscó a mí. Cuando comencé pensé en el nombre que le daría a este proyecto y me acordé mi sobrino Juan Felipe cuando estaba chiquito. Y sí, Rojo Caperuza es memoria, recuerdo, son historias tejidas”
En su casa blanquita de ensueño, llena de juguetes, lanas, agujas, colores y libros, Isabel nos cuenta sobre la personalidad de los muñecos, encanto que le imprime en las horas y horas de tejido y de las lecturas bonitas de los cuentos en los que inspira para cada personaje.
“Al Bazar de la confianza llevaré una propuesta denominada Magia, que tiene muñecos tejidos relacionados con este tema, como Harry Potter, Alicia en el país de las maravillas, Mary Poppins; porque mi idea con Rojo Caperuza es también fomentar la lectura a través del tejido”. También voy a llevar una propuesta propia llamada Peces de ciudad y pájaros Carriquíes, Mirlos y Barranqueros, típicos en Santa Elena; y las brujas verdes que son para las cocinas”.
Rojo Caperuza estará ubicado en el espacio de Café Arte en el Salón Restrepo del Jardín Botánico, el próximo 16 de julio en el Bazar de la Confianza. Pero si su interés es más que comprar, Isabel ha convertido su casa en la vereda el Rosario, sector Barro Blanco de Santa Elena, en una escuela/taller donde dicta clases virtuales y presenciales.